Sábado 26 de julio - Everglades y Miami Beach
Alligator a la espera de turistas imprudentes
Tan carismáticos como sus paisanos Lynyrd Skynyrd y Allman Brothers, los alligators son un clásico de Florida. Bien aconsejados por mi colega Jose de Ibercaja, nos dirigimos a los Everglades, monumental extensión pantanosa situada a escasos minutos de Miami. Coopertown, diminuta aldea de 8 habitantes, es la base de operaciones unos rednecks chilfados que presumen de ofrecer el mejor tour de la zona. A bordo de un destartalado hoovercraft, conducido de forma temeraria por uno de los paletos, nos adentramos durante una hora por el hogar de los caimanes.
Bonita visita amenizada por los derrapes a toda velocidad de la embarcación, lo impresionante del paisaje, los avistamientos de alligators y los chistes baratos del guía. Según nuestro maestro de ceremonias "si caemos al agua, la unica forma de escapar de un caimán es que tu compañero de naufragio nade más lento que tu". Curiosamente, parece que en el fondo los bichos no disfrutan comiendo carne humana. Es demasiado salada para ellos!
Tras nuestra experiencia Cocodrilo Dundee, Miami Beach aguardaba. Nuestro amigo Frankie, miembro de la númerosa colonia española en Florida, nos acogía esa noche en su apartamento y de paso nos mostraría las bondades de la nocturnidad local. Como bien recordareis de "Corrupción en Miami", la ostentación allí importa. Digno de ver como su paseo marítimo se convierte en un desfile de Ferraris, Porsches y bonitas modelos de 1,80. Ajenos al lujo que nos rodeaba, nos decantamos por un clásico botellón al aire libre que celebraban un grupo de compatriotas. Tras unas copitas disfrutando de los 35 grados y el 500% de humedad que marcaba a medianoche el termometro, nos dirigimos al único club underground de la zona. De camino nos cruzamos con un grupo de niggers de Baltimore. Emocionado por la conexión "The Wire", nos hicimos una foto y les regalé el cuarto de botella de Jack Daniels que nos quedaba. Vista su alegría por mi presente, tengo amigos para siempre en Maryland.
Incluso en los peores antros, se nota que Miami Beach es zona para ricos. Si bien la entrada era gratuita, la única forma de saltarse la enorme cola era comprar de antemano un botella de licor. 115 $ por una botella de J&B. Como eramos 4 y de una botella salen 10-12 copas, no era mal trato. Ah amigos! Nunca subestimeis el poder de las taxes (impuestos) y las tips (propinas)! A la salida, los caraduras nos cargaron en la visa 60$ más por esos conceptos. Timados pero etilicamente felices por el buen rato pasado, a las 07:00 de la mañana nos encontramos en una disyuntiva. O dormíamos unas horitas en casa de Frankie o de empalme dirección a Tallahassee. Como buenos pirados, elegimos la segunda opción. Era la segunda noche consecutiva en vela, pero las energías aún estaban intactas! Tras mi caprichoso bañito en la playa de Miami Beach, nos despedíamos del hogar de Dexter. Si todo iba bien, a mediodía llegaríamos a Cabo Cañaveral, lugar especial para Barbe, astronauta fustrado.
Sempre m'ha cridat l'atenció Miami, però crec que m'hi sentiria tan lletja que no gaudiria de la visita XD
ResponderEliminarBuenas de nuevo...
ResponderEliminarLos Everglades magnificos aunke hubiera subido la emocion si fulk fito se hubiera pegado un chapuzon, el guia tarado y con mi ingles olvidado me parece ke solo le entendi cuando dijo ke mejor no meter la mano en el agua si no kerias tener ke dejar de disfrutar de la manicura...
Referente a la noxe fiestera de miami, simplemente mortal, ya no solo por la taja y la buena fiesta sino tambien pq parecia ke el agua se condensaba sobre el cuerpo,ke boxorno a veces no se pq me kejo de barcelona, me uno a Don Kapitan para agradecer a Franky,la novia, hermana y andaluza la buena acojida ke tuvimos, nunca olvidare la despedida desde el balcon mirandonos komo diciendo -Estos es tan lokos...se van de empalme...no puede ser- (solo les faltaba mover un pañuelito balnco), yo fui el ke konduci primero, os digo ke fue una experiencia mistica y mas cuando solo salir nos agarro un diluvio ke ni se veian las luces del coche de delante...
Saludos
Bar-B
mola, mola, esto se esta poniendo interesante...espero deseoso una nueva dósis de aventuras
ResponderEliminarsaluti!
Impresionante el rey de los pantanos solo le falta el rifle!!
ResponderEliminarMuy bueno lo de los "hermanos" de Baltimore. Por cierot vaya nivelazo hay en Miami, no?