Ahora que Motley Crue han vuelto a lo grande y que su "Saints of Los Angeles" recibe alabanzas por doquier, es un buen momento para recordar a aquel uno de los personajes más infravalorados de nuestro mundillo. Casi nadie se acuerda de ese front-man de morena pelambrera rizada que aceptó la dificil misión de suplir al irremplazable Vince Neil, cuando éste, a principios de los 90, se tomó unas vacaciones de Motley Crue. Hablo, claro que si, de Mr. John Corabi, un hombre peleado con el éxito.
Eterno aspirante a rock star, el número de oportunidades en que ha estado a punto de formar parte de la realeza roza la comicidad. El asunto adquiere tintes de injusticia si contamos con la enorme calidad que atesora Corabi, un tipo que merecería estar en cualquier rock n' roll hall of fame que se os pase por la cabeza.
Tras abandonar a finales de los 80 Angora, su efímera primera banda con la que sólo grabó una demo, John Corabi formó un grupo destinado a reinar, The Scream. Su album de debut en 1991, "Let it scream", un bombazo hard-blues, con un sonido que recuerda a los Cinderella de "Long Cold Winter" y "Heartbreak Station", gustó mucho. Todo parecía indicar que The Scream tenían un gran futuro por delante, pero justo entonces Corabi recibió una oferta que no pudo rechazar. Impresionado por su carisma y su personalísima voz, Nikki Sixx no dudó en contratar a John Corabi una vez Vince Neil estuvo fuera de Motley Crue. Fue un duro trago, pero el sacrificio de The Scream era inevitable.
La labor de John Corabi en Motley Crue fue excepcional. Grabó con ellos (participando activamente en las composiciones) un magnífico e infravaloradísimo disco, el homónimo "Motley Crue" (1994), donde los angelinos rompen abruptamente con su pasado. Endureciendo notablemente su sonido, aquí no hay rastro de su hard rock festivo marca de la casa. Sólido como una roca, relleno de riffs pesados e influenciado en parte por el metal prevalenciente en la época (Pantera, Anthrax de Bush), está claro que "Motley Crue" no es el album que los fans esperaban de su banda favorita. ¿Donde estaban las odas a las chicas, la juerga y la velocidad? El disco vendió una mierda y John sufrió un doloroso despido improcedente. Joder, "Power to the music" o "Hooligan's holiday" son algunas de las mejores canciones que encontrareis en el catálogo de los Crue.
La segunda mitad de los 90 vieron nacer a Union. Superbanda que unió a con Bruce Kulick, recién expulsado de de KISS, y con un sonido parecido a The Scream, no acabaron de cuajar. Su primer album "Union" (1998), sin ser nada del otro mundo, hubiese merecido mejor suerte. Tras girar por USA y ver que la que cosa no iba a ninguna parte, Corabi y Kulick se tomaron a Union como un proyecto secundario.
Corabi, a pesar de la amarga ruptura, nunca perdió la relación con Nikki Sixx. A principios de siglo, éste le dio la oportunidad de formar parte de Brides of Destruction, el divertimiento que Sixx montó con Tracii Guns. No iba a ser el cantante, se limitaría a guitarra rítmica y coros, pero era una gran plataforma para volver a actuar ante grandes audiencias, y quien sabe, quizá su carrera volvería a reflotar. No obstante, al ver como se desenvolvieron las cosas (Sixx le prometió falsamente que el album iría en la onda de "Motley Crue"), Corabi no quiso estar involucrado en una mierda de tales dimensiones y volvió al underground.
Desde entonces, John Corabi sigue con su vida de rock n' roll gipsy. Girando por medio mundo como mercenario a sueldo o al frente de sus mil y un proyectos para selectas minorías, no tira la toalla. Pude ser testigo de la grandeza de Corabi cuando se acercó por Barcelona enrolado en ESP (Eric Singer Project), pasatiempos del batería de KISS y Alice Cooper. Acompañados por el habitual Bruce Kulick y la bestia de Chuck Garric al bajo, nos dieron una memorable velada en la que se dedicaron a interpretar clásicos inmortales del rock, especialmente de los 4 superhéroes maquillados. Corabi dió una lección de carisma y saber estar en un escenario, y fue muy bonito escuchar ese añejo "Power to the music".
Y doloroso fue verle como mega-secundario en la reciente gira española de Ratt, donde no es más que un triste mercenario a la guitarra rítmica y sólo podemos oír su portentosa voz en los coros. Parece que recientemente, y fiel a su modus operandi, ha mandado a la mierda a Ratt y se va a centrar en su carrera en solitario. Como cantaba con The Scream, "I believe in me". Yo también creo en tí, John!
Para que comprobeis que las alabanzas a John Corabi no son gratuitas, os dejo con ese fantástico "Man in the moon" de The Scream y el trallazo llamado "Hooligan's holiday" con Motley fuckin' Crue.
Eterno aspirante a rock star, el número de oportunidades en que ha estado a punto de formar parte de la realeza roza la comicidad. El asunto adquiere tintes de injusticia si contamos con la enorme calidad que atesora Corabi, un tipo que merecería estar en cualquier rock n' roll hall of fame que se os pase por la cabeza.
Tras abandonar a finales de los 80 Angora, su efímera primera banda con la que sólo grabó una demo, John Corabi formó un grupo destinado a reinar, The Scream. Su album de debut en 1991, "Let it scream", un bombazo hard-blues, con un sonido que recuerda a los Cinderella de "Long Cold Winter" y "Heartbreak Station", gustó mucho. Todo parecía indicar que The Scream tenían un gran futuro por delante, pero justo entonces Corabi recibió una oferta que no pudo rechazar. Impresionado por su carisma y su personalísima voz, Nikki Sixx no dudó en contratar a John Corabi una vez Vince Neil estuvo fuera de Motley Crue. Fue un duro trago, pero el sacrificio de The Scream era inevitable.
La labor de John Corabi en Motley Crue fue excepcional. Grabó con ellos (participando activamente en las composiciones) un magnífico e infravaloradísimo disco, el homónimo "Motley Crue" (1994), donde los angelinos rompen abruptamente con su pasado. Endureciendo notablemente su sonido, aquí no hay rastro de su hard rock festivo marca de la casa. Sólido como una roca, relleno de riffs pesados e influenciado en parte por el metal prevalenciente en la época (Pantera, Anthrax de Bush), está claro que "Motley Crue" no es el album que los fans esperaban de su banda favorita. ¿Donde estaban las odas a las chicas, la juerga y la velocidad? El disco vendió una mierda y John sufrió un doloroso despido improcedente. Joder, "Power to the music" o "Hooligan's holiday" son algunas de las mejores canciones que encontrareis en el catálogo de los Crue.
La segunda mitad de los 90 vieron nacer a Union. Superbanda que unió a con Bruce Kulick, recién expulsado de de KISS, y con un sonido parecido a The Scream, no acabaron de cuajar. Su primer album "Union" (1998), sin ser nada del otro mundo, hubiese merecido mejor suerte. Tras girar por USA y ver que la que cosa no iba a ninguna parte, Corabi y Kulick se tomaron a Union como un proyecto secundario.
Corabi, a pesar de la amarga ruptura, nunca perdió la relación con Nikki Sixx. A principios de siglo, éste le dio la oportunidad de formar parte de Brides of Destruction, el divertimiento que Sixx montó con Tracii Guns. No iba a ser el cantante, se limitaría a guitarra rítmica y coros, pero era una gran plataforma para volver a actuar ante grandes audiencias, y quien sabe, quizá su carrera volvería a reflotar. No obstante, al ver como se desenvolvieron las cosas (Sixx le prometió falsamente que el album iría en la onda de "Motley Crue"), Corabi no quiso estar involucrado en una mierda de tales dimensiones y volvió al underground.
Desde entonces, John Corabi sigue con su vida de rock n' roll gipsy. Girando por medio mundo como mercenario a sueldo o al frente de sus mil y un proyectos para selectas minorías, no tira la toalla. Pude ser testigo de la grandeza de Corabi cuando se acercó por Barcelona enrolado en ESP (Eric Singer Project), pasatiempos del batería de KISS y Alice Cooper. Acompañados por el habitual Bruce Kulick y la bestia de Chuck Garric al bajo, nos dieron una memorable velada en la que se dedicaron a interpretar clásicos inmortales del rock, especialmente de los 4 superhéroes maquillados. Corabi dió una lección de carisma y saber estar en un escenario, y fue muy bonito escuchar ese añejo "Power to the music".
Y doloroso fue verle como mega-secundario en la reciente gira española de Ratt, donde no es más que un triste mercenario a la guitarra rítmica y sólo podemos oír su portentosa voz en los coros. Parece que recientemente, y fiel a su modus operandi, ha mandado a la mierda a Ratt y se va a centrar en su carrera en solitario. Como cantaba con The Scream, "I believe in me". Yo también creo en tí, John!
Para que comprobeis que las alabanzas a John Corabi no son gratuitas, os dejo con ese fantástico "Man in the moon" de The Scream y el trallazo llamado "Hooligan's holiday" con Motley fuckin' Crue.
Lo siento pero yo me quedo con el cerdo de Vince Neil. Salud.
ResponderEliminarNo lo conocía apenas. Solo sabía de su existencia por Brides Of Destruction. Una gran sorpresa, tiene una voz de puta madre.
ResponderEliminarCoincido con Paulamule. El puerco de Vince Neil nació para estar ahí. Que se merezca el infierno s da por sentado.
ResponderEliminarDe todas formas una buenísima entrada.
Saludos.
Mi debilidad por los Motley de Neil es a veces injustificable, pero ese disco que relatas de The Scream, "Let It Scream" fue memorable, al menos para mi selecto y diminuto grupo de hardrockeros. Otro gallo habría cantado si el bueno de Corabi hubiese dejado allí sus posaderas.
ResponderEliminarSaludos desde la cueva.
Corabi es uno de esos Rock'n'Roll loosers que tan solo una minoría hemos podido apreciar. Coincido con Sammy que el disco homónimo que grabó con los Crüe no era ninguna basura, tan solo no colmaba las espectativas de los fans.
ResponderEliminarEl disco del 94 con los Crüe es grande, cuesta de entrar porque como bien señalas supone un cambio radical con respecto a lo hecho anteriormente pero tiene 6 o 7 temas grandes y aunque Vince NEil sea la voz insustituible en Mötley me hubiera gustado como se especulo que John Corabi se hubiese quedado para tocar la guitarra rítmica y porque no cantar algunas canciones.
ResponderEliminarSaludos
Yeah, también me quedo con Vince, aunque el más crack sea Tommy Lee. Por cierto, ayer a la noche echaban un reportaje sobre tatuajes en canal Biography (sí, soy de los que ven los canales de documentales xD) y salían, entre una colección de freaks bastante notable, los Motley Crue, con Vince Neil hablando en varios cortes y bueno, estuvo bastante "entretenido" jajaj.
ResponderEliminarSin duda "Motley crue" es un muy buen disco de hard rock clasico con influencias 70´s pero no tiene que ver mucho con el sonido clasico Motley, al contrario que el disco "New tatoo" que sacaron sin Tommy Lee del que no entiendo porque no tocan nada en directo.
ResponderEliminarDesde luego John Corabi mereceria mejor suerte
Prefiero a Vince en el seno de los Crüe pero Corabi es un pedazo de cantante como la copa de un pino.
ResponderEliminarEste tío se merece esta excelente entrada.
Saludos
Hey!
ResponderEliminarNo pretendia crear un debate Corabi vs. Neil. Como todos vosotros, yo también prefiero a Vince al frente de los Crue, sería de tontos querer otra cosa!
Tan sólo era pequeño tributo, sin entrar en comparaciones. Corabi merecería capitanear una buena banda que tocase ante miles de personas y vender un puñado de discos.
Pues tengo que hacer alusion a este post que has hecho Samu por que es uno de mis temas favoritos del rock n roll. Comentar que Motley Crue es el mejor disco que ha sacado Motley Crue despues del mitico dr.Feelgood para mi, composiciones brutales, Hardrockeras algo grunchis y a la vez metalerillas, la verdad que en cuanto lo escuche se hizo uno de mis discos favoritos, y es que me parece patetico esto de que "si no es vince neil no es motley crue" o otras gilipolleces que no entiendo basicamente. Lo mas probable es que cuando escucho musica no lo hago con el sentimiento que lo haria una quinceañera con un disco de Backstreet Boys. Simplemente es un disco que podria haber mantenido a Motley en el panorama del hard rock/grunge en los 90 pero por culpa de los fans se comió los mocos. A cambio de las pocas ventas y los fans nazis se hizo el peor disco de Motley Crue y para mi de los peores que he escuchado en mi vida "generation swine".
ResponderEliminarClaro, todos queremos al decadente Neil al frente de Motley Crue. Pobre John Corabi, nació demasiado tarde, en una época que no era la suya. Debería haber reinado en los 70, teloneando a Lynyrd Skynyrd, cuando las rockstars sólo se lamentaban del pato a la japonesa y los M&Ms marrones.
ResponderEliminarSaludos
Personalmente, para alguien que viene del mundillo Grunge, el disco que Mr. Corabi registró con Mötley Crüe es de lo más recomendable. Quizás ese sea el problema, es un disco maldito para los que han seguido de cerca a la banda desde tiempos inmemoriables. Pero para gustos como siempre los colores.
ResponderEliminarY respecto al pobre John Corabi, solo queda decir que el talento no siempre va asociado al éxito. Pero comparaciones con Vince Neil al margen, el tío tiene una voz y una presencia acojonante. Un loser de lujo.
Saludos!