Sus años de esplendor quedaban atrás, pero coño, ya que estaba viviendo en Londres ese verano, me apetecía un huevo asistir a un festival de Reading. Además, tocaban Backyard Babies, quienes pronto iban a editar la esperadísima continuación a "Total 13", la que les iba a encumbrar como los nuevos Guns N' Roses, y claramente eran mi banda favorita en aquellos momentos. Así que pedí un par de días libres en el restaurante donde lavaba platos y junto con Carla, mi chica aquellos años, tomamos un tren hacia la campiña inglesa. El festival se desarrolló durante viernes, sábado y domingo, pero tan sólo asistimos las dos últimas jornadas; ahora no recuerdo los motivos, supongo que fue cuestión de pasta, pero mientras miro el cartel, salvando Iggy y The Donnas, seguro que por entonces ya pareció tan poco atractivo como ahora.
La primera impresión al llegar fue desoladora. En un solo día de festival, los ingleses se las habían apañado para convertir Reading en un puto estercolero. La basura ya ocupaba cada palmo del recinto, especialmente en la zona de acampada, donde las tiendas de campaña flotaban sobre un mar de latas de cerveza vacias, bolsas de plástico, vómitos y barro. La leyenda es cierta, son unos cerdos. Por suerte, yo no iba a sufrir de cerca su mierda, ya que nuestro abono no incluía derecho a acampada. ¿Dónde íbamos a dormir? Buena pregunta a la que no tenía respuesta. Fuímos derechos a la carpa donde Backyard Babies iban a actuar como cabezas de cartel. Aún faltaban un puñado de horas y 5 o 6 bandas por delante, pero había que pillar sitio. De los diversos "teloneros", guardo buen recuerdo de Nebula y Anyone, un desconocido combo a lo Jane's Addiction que hizo un gran show.
El concierto de Lostprophets lo tengo grabado en la memoria, pero por motivos diferentes. Era la era dorada del nu metal y esa panda de matados provocaron la histeria. Su inmensa popularidad nos pilló por sorpresa y nos vimos absolutamente "caught in the mosh". Del escenario llovió gente sin cesar durante todo el show ... con la patética peculiaridad de que los chavales hacían cola ordenadamente en un lateral para subir al escenario y saltar! La tragedia se mascó cuando una tía mastodóntica, pesaría el doble que yo, decidió que mi mochila que tenía a los pies le molestaba y decidió arrojarla al foso de los fotógrafos. Allí tenía mi pasaporte, mi dinero, mi comida, mi cámara de fotos, mi camiseta de repuesto, TODO. Mi reacción espontánea fue soltarle un guantazo en la cara, con todas mis fuerzas. Aún a veces siento remordimientos, pues fue la primera y última vez que he pegado a un extraño, pero ver como mi futuro a corto plazo volaba por los aires y desaparecía de mi vista me alteró. Además, ella era una chicarrona del norte y le dolió más el susto que el golpe, seguro. Todo hay que decirlo, un par de horas después tuve la potra de recuperar mi bolsa sana y salva.
Backyard Babies, a quienes ya había visto en el legendario bolo de Mephisto y como teloneros de AC/DC, dieron un concierto enorme. Nicke aún no volvía a ser rubio y conservaban toda su fuerza. De echo, creo que esta fue la última ocasión en que salí contento de una actuación suya, pues en la inmediata gira de "Makin' enemies ..." ya me defraudaron.
Bien, terminada la fiesta, era la hora de dormir, así que nos acurrucamos junto a una verja, tapados con los abrigos, para intentar conciliar el sueño. A la media hora desistimos. Hacía frío y el suelo estaba duro. El propio Dregen, que pasaba por allí, se interesó por nuestro estado. No nos invitó a pasar la noche en su autocar de gira, pero al menos nos indicó que había una carpa de la cruz roja habilitada para los "sin techo". Allí nos atendieron bien, y a parte de un colchón de dos dedos, nos dieron una sopita caliente. La putada es que el resto de pernoctadores eran drogatas hasta las cejas de popper, muy de moda esos días en Inglaterra. A pesar de la juerga de los pitufos (el popper enajena y aflauta la voz), un par de horitas buenas las dormimos.
Lo que no dormimos esa noche, lo dormimos la mañana siguiente en el concierto de Staind. Eran tan aburridos que invitaban a tumbarse a roncar en el césped. Ya algo descansados y con la energía de las barritas de cereales que había ido robando del trabajo como una hormiguita, afrontamos una retahila de conciertos muy potentes. Fear Factory, System of a Down, The Cult y Queens of the Stone Age del tirón. Dino Cazares y los suyos me dejaron buen sabor de boca y recuerdo un "Replica" final apoteósico. System of a Down aún no habían lanzado "Toxicity" y no eran demasiado populares. Aunque sólo reconocí su single "Sugar", me gustaron mucho. The Cult arrasaron, con un Ian Astbury salvaje que terminó cantando "Love Removal Machine" entre el público. Acababan de volver al ruedo con el cojonudo "Beyond Good and Evil" y estaban con muchas ganas. Fue una excelente primera toma de contacto con una banda con la que llevaba años soñando con ver. Cualquier otro recuerdo del show QOTSA queda eclipsado por la imagen de Nick Oliveri desnudo. De echo, ya saltó a escena en pelotas! Y amigos, tiene los huevos más largos que he visto jamás. Ah, finalizaron el concierto con una instrumental psicotrópica de más de media hora. La gente ya no sabía donde mirar.
A Papa Roach ni los recuerdo, de tanto que me gustarían, y a Marilyn Manson no les presté demasiada atención, cosa de lo que me arrepiento un poco. Visto en perspectiva, sus peores años aún no habían llegado. Justo cuando empezaba el concierto de esa vaca sagrada del rock, Eminem, el peor cabeza de cartel que habrá tenido Reading en sus 40 años de existencia, nos encaminamos hacia la estación de tren. A la mañana siguiente me aguardaban de nuevo las montañas de platos sucios.
La primera impresión al llegar fue desoladora. En un solo día de festival, los ingleses se las habían apañado para convertir Reading en un puto estercolero. La basura ya ocupaba cada palmo del recinto, especialmente en la zona de acampada, donde las tiendas de campaña flotaban sobre un mar de latas de cerveza vacias, bolsas de plástico, vómitos y barro. La leyenda es cierta, son unos cerdos. Por suerte, yo no iba a sufrir de cerca su mierda, ya que nuestro abono no incluía derecho a acampada. ¿Dónde íbamos a dormir? Buena pregunta a la que no tenía respuesta. Fuímos derechos a la carpa donde Backyard Babies iban a actuar como cabezas de cartel. Aún faltaban un puñado de horas y 5 o 6 bandas por delante, pero había que pillar sitio. De los diversos "teloneros", guardo buen recuerdo de Nebula y Anyone, un desconocido combo a lo Jane's Addiction que hizo un gran show.
Anyone
El concierto de Lostprophets lo tengo grabado en la memoria, pero por motivos diferentes. Era la era dorada del nu metal y esa panda de matados provocaron la histeria. Su inmensa popularidad nos pilló por sorpresa y nos vimos absolutamente "caught in the mosh". Del escenario llovió gente sin cesar durante todo el show ... con la patética peculiaridad de que los chavales hacían cola ordenadamente en un lateral para subir al escenario y saltar! La tragedia se mascó cuando una tía mastodóntica, pesaría el doble que yo, decidió que mi mochila que tenía a los pies le molestaba y decidió arrojarla al foso de los fotógrafos. Allí tenía mi pasaporte, mi dinero, mi comida, mi cámara de fotos, mi camiseta de repuesto, TODO. Mi reacción espontánea fue soltarle un guantazo en la cara, con todas mis fuerzas. Aún a veces siento remordimientos, pues fue la primera y última vez que he pegado a un extraño, pero ver como mi futuro a corto plazo volaba por los aires y desaparecía de mi vista me alteró. Además, ella era una chicarrona del norte y le dolió más el susto que el golpe, seguro. Todo hay que decirlo, un par de horas después tuve la potra de recuperar mi bolsa sana y salva.
Backyard Babies, a quienes ya había visto en el legendario bolo de Mephisto y como teloneros de AC/DC, dieron un concierto enorme. Nicke aún no volvía a ser rubio y conservaban toda su fuerza. De echo, creo que esta fue la última ocasión en que salí contento de una actuación suya, pues en la inmediata gira de "Makin' enemies ..." ya me defraudaron.
Bien, terminada la fiesta, era la hora de dormir, así que nos acurrucamos junto a una verja, tapados con los abrigos, para intentar conciliar el sueño. A la media hora desistimos. Hacía frío y el suelo estaba duro. El propio Dregen, que pasaba por allí, se interesó por nuestro estado. No nos invitó a pasar la noche en su autocar de gira, pero al menos nos indicó que había una carpa de la cruz roja habilitada para los "sin techo". Allí nos atendieron bien, y a parte de un colchón de dos dedos, nos dieron una sopita caliente. La putada es que el resto de pernoctadores eran drogatas hasta las cejas de popper, muy de moda esos días en Inglaterra. A pesar de la juerga de los pitufos (el popper enajena y aflauta la voz), un par de horitas buenas las dormimos.
Lo que no dormimos esa noche, lo dormimos la mañana siguiente en el concierto de Staind. Eran tan aburridos que invitaban a tumbarse a roncar en el césped. Ya algo descansados y con la energía de las barritas de cereales que había ido robando del trabajo como una hormiguita, afrontamos una retahila de conciertos muy potentes. Fear Factory, System of a Down, The Cult y Queens of the Stone Age del tirón. Dino Cazares y los suyos me dejaron buen sabor de boca y recuerdo un "Replica" final apoteósico. System of a Down aún no habían lanzado "Toxicity" y no eran demasiado populares. Aunque sólo reconocí su single "Sugar", me gustaron mucho. The Cult arrasaron, con un Ian Astbury salvaje que terminó cantando "Love Removal Machine" entre el público. Acababan de volver al ruedo con el cojonudo "Beyond Good and Evil" y estaban con muchas ganas. Fue una excelente primera toma de contacto con una banda con la que llevaba años soñando con ver. Cualquier otro recuerdo del show QOTSA queda eclipsado por la imagen de Nick Oliveri desnudo. De echo, ya saltó a escena en pelotas! Y amigos, tiene los huevos más largos que he visto jamás. Ah, finalizaron el concierto con una instrumental psicotrópica de más de media hora. La gente ya no sabía donde mirar.
A Papa Roach ni los recuerdo, de tanto que me gustarían, y a Marilyn Manson no les presté demasiada atención, cosa de lo que me arrepiento un poco. Visto en perspectiva, sus peores años aún no habían llegado. Justo cuando empezaba el concierto de esa vaca sagrada del rock, Eminem, el peor cabeza de cartel que habrá tenido Reading en sus 40 años de existencia, nos encaminamos hacia la estación de tren. A la mañana siguiente me aguardaban de nuevo las montañas de platos sucios.
15 comentarios:
como le cuelgan los huevos a Oliveri!
Gran historia.
La verdad que sólo me atrae el cartel del domingo.
Cuando hablas de pegarte con un extraño, quieres decir que sólo te pegaste esa vez????????
¡Menudo Toni Montana estabas hecho! Friegaplatos de día, macarra de noche. ¿En serio le arreaste un hostión a una vaca-burra? Eso es actitud, tío ;D
Hacía mucho tiempo que no disfrutaba con una historieta real de estas... jejej me he reido mucho... Mola tio!;)
Estas hecho un macarra !
Un saludo
Buena crónica con encantadoras anécdotas personales. Y aunque el cartel dejaba bastante que desear, pero los cojones de Oliveri y un Ian Astbury en plan Morrison sin duda merecieron la pena.
Je,je....ya hemos hablado muchas veces de nuestras experiencias en Reading, aunque la mia fue más ordenada alla por el año 96, por lo que veo el segundo día tocaban Rocket from the Crypt, no los viste?
Supongo que en aquellos momentos (lo de la mochila, dormir como vagabundos, etc) lo pasarías jodido.
Pero ahora leído y es bastante divertido xD
¡¡¡¡Este es el tipo experiencias que echo en falta en el correo del Popu ultimamente!!!!
Lo de la hostia a la gorda es memorable, y los huevos colganderos de Nick Oliveri podrian rivalizar directamente con los de Evan Stone......
la noche en la carpa con los "popperos" fue apoteósica jajaja no pegamos ojo! qué putos pesados! a las tantas de la madrugada a uno de la cruz roja le dimos tanta pena de vernos ahí tirados, intentando sobar soportantdo el frío y los frikis, que nos vino a arropar con una manta ruinosa... éramos como un par de "homeless"desamparados jajajaj
Me habias contado alguna historieta d este Reading, joder hay que ser valiente para irse a un evento de estos y no tener algun sitio para dormir algo y mas si vas dos dias.
pd: vas a ir a Warrior soul?
Estuve en ese Reading precisamente el primer dia que cuentas ... y recuerdo el encantador aroma a british estiercol y la manada de teenagers idos de la cabeza por todos lados. Mal dia, de todos modos. No entiendo porque no fui el dia de antes o el de despues que eran bastantes mas atractivos.
Así a simple vista, cierto que el cartel no es muy atractivo, pero más por los headliners (salvo Manics) que por los seundarios. En fin, Reading debió ser toda una experiencia.
El guantazo fue una reacción espontánea y no, nunca me he peleado. Siempre he preferido correr los 100 metros en 6 segundos. Nos vemos en Warrior Soul.
Joder, es que lo de la mochila era una putada muy gorda.
Nada como las experiencias de los festivales sin dinero, que duermes donde puedes, cagas cuando puedes y comes si hay suerte...
¡Impactante la foto de Oliveri! Este hombre es una cabra, definitivamente.
Joder qué intenso. Ver a Backyard Babies, The Cult, QOTSA y unos cuantos más en tan buen momento para ellos debió se rla hostia. Me da miedo lo que me voy a encontrar por ejp en el Azjena con The Cult que esta´n un poco apáticos ya (o quizás tenga una gran noche).
Lo de la gorda y la mochila pa matarla, Hay que ser gilipollas.
Joder, entrañable relato. ¿Ahora aguantarías todo eso de nuevo?
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